Militarrak

Ollo Bidaurreta, Nicolás

General carlista navarro, nació en Ibero el 6 de diciembre de 1816. Fallecido el 29 de marzo de 1874.

Ingresa como voluntario en el ejército del Pretendiente don Carlos a los dieciocho años. Ascendido a subteniente en 1836, se adhiere al Convenio de Bergara con dicha graduación. Ingresa entonces en el ejército del Gobierno, pero en 1841 participa en la insurrección de O'Donnell, por lo que tiene que huir a Francia, donde permanece hasta 1843. Asciende a teniente, y en 1856 alcanza el grado de comandante. Participa en la campaña de Africa donde por sus méritos obtiene la Cruz de San Fernando y el ascenso a teniente coronel, pero no creyéndose suficientemente recompensado, y considerándose postergado, pide el retiro y marcha a su hogar, donde permanece alejado del ejército y la política hasta 1868. Es allí donde recibe la visita del general carlista Elio, quien le invita a participar en el próximo levantamiento, cosa que Ollo hace inmediatamente. Se dedica a organizar fuerzas en diversos pueblos navarros.

En 1872 el comandante general de Navarra y Vascongadas, Dorregaray, confía la comandancia general de Navarra a nuestro biografiado, con el grado de general de brigada. Cumple Ollo a la perfección en el puesto que le encomiendan e imprime tal actividad a las acciones bélicas que consigue el entusiasmo de sus tropas, por una parte, y por la otra el temor y el respeto de las columnas liberales. Efectúa unas correrías por Guipúzcoa, donde eleva el ánimo de las tropas de la provincia por las victorias que consigue. Regresa a Navarra, y derrota completamente a las fuerzas liberales en la batalla de Lecumberri el 22 de febrero de 1873. Contribuye efectivamente a diversas victorias carlistas, como la de Montejurra, y en 1874 es llamado al sitio de Bilbao. Contrario al cerco de la capital vizcaína, participa en él por disciplina militar, destacando en la línea de Somorrostro, donde demuestra su genio militar y su capacidad organizativa.

Los días 24 y 25 de febrero de 1874 derrota a los batallones del general Moriones, por lo que es el mismo ministro de Marina y el presidente del Consejo Ejecutivo, Topete y Serrano respectivamente, los que se ven obligados a acudir en contra de Ollo. A pesar de la superioridad en hombres y armas de los liberales, son derrotados de nuevo por Ollo en San Pedro de Abanto, por lo que es ascendido a teniente general y recompensado con el título de Conde de Somorrostro. Pocos días después de las brillantes victorias, el 29 de marzo, cuando un grupo de altos mandos carlistas estaban observando los movimientos de los liberales de Bilbao, una granada explotó entre ellos, resultando heridos de gravedad, Rada, Escudero, Torrecilla y Ollo.

Falleció nuestro general el mismo día, en San Salvador del Valle, llenando de consternación a las filas carlistas. Ocurrió este triste suceso en un momento de apogeo de la campaña carlista, e influyó decisivamente en el posterior desarrollo de la contienda. No fue Ollo el militar de más alta graduación de la II Guerra Carlista, pero sí recayeron sobre él las más grandes responsabilidades en el transcurso de la guerra. Modesto militar cuando comenzó la campaña, demostró a lo largo de ella su genio militar en numerosas ocasiones, parangonable casi al de Zumalacárregui. En 1867 había publicado en Pamplona Aguas y baños minero-medicinales de Ibero.