Abogado y hombre público pamplonés del siglo XIX-XX que disfrutó del titulo de marqués de Echeandía. Fue vocal de la Comisión de Monumentos Históricos y Artísticos de Navarra, Comisario regio de Agricultura, miembro de la Junta de Beneficencia, diputado foral en 1863, alcalde de Pamplona, y senador del Reino en 1891. Buen conocedor de la historia navarra, fue uno de los fundadores y redactores de la Revista del antiguo Reino de Navarra. Fue el principal promotor del traslado de los restos de los reyes de Navarra de Leyre a Pamplona, publicando en 1866, con ocasión de haberlo decidido la Diputación, una Memoria sobre los restos de los Reyes de Navarra, cuyos restos se hallaron en el Monasterio de Leyre y han de ser trasladados al Panteón Real de la Catedral de Pamplona. Asistió a la Asamblea de Pamplona del 30 de diciembre de 1918, figurando como uno de los firmantes de la moción separadora de Navarra del proceso autonómico.