Monarkia eta noblezia

Carlos IV de Navarra

Guerra de agramonteses y beamonteses (1451). A pesar de la reconciliación, Juan persiste en su negativa a abandonar la corona real. Para entonces, los navarros se hallan ya divididos en dos bandos, agramonteses, partidarios de Juan (Pedro de Navarra, señor de Agramont, y Pierres de Peralta "El Joven") y beamonteses, a favor del Príncipe (Juan de Beaumont y su hermano Luis, conde de Lerín, más los Luxe benavarros) a los que sólo falta la ocasión de echar mano a las armas. Veáse Agramonteses y Beamonteses. Esta se presenta en septiembre de 1451: entra en Navarra, llegando hasta Estella, un ejército castellano al mando del heredero de Castilla, D. Enrique. El Príncipe pacta con él para que se retire (7 septiembre). D. Juan creyó ver en este acto una connivencia clara entre los dos infantes -connivencia dirigida contra él- y envía a la madrastra como gobernadora del reino. Estalla la guerra que no hubiera vacilado Carlos en contener "si -dice- la hija del almirante no hubiese venido a gobernar en tanta ofensa suya y del Reino". Los dos infantes ponen sitio a Juana Enríquez en Estella. Acude D. Juan, pero ante el gran número de sitiadores, se vuelve en busca de refuerzos.