Kontzejuak

ALDATZ

Urbanismo y construcciones civiles

Este antiguo señorío, al que en la zona se conoce con el nombre de Aldaz-Echavacoiz, se encuentra en el camino que conduce de Aldaba a Ariz, sobre un leve promontorio. Su casco urbano se reduce a la iglesia y al palacio, así como algún otro edificio de menor empaque. El palacio, que no figura en las nóminas de cabo de armería, es sin embargo un inmueble de relevancia. Su planta consta de un cuerpo principal de planta rectangular y tres alturas, en el que distinguimos una zona más antigua, situada a la izquierda de la fachada, edificada en buena sillería. En este paño se abre una puerta apuntada, con arco de trece dovelas largas, que llevan la rosca moldurada con una media caña. En la clave se ha labrado un escudete. Parece datar de la segunda mitad del siglo XV. En la primera planta hay una ventana geminada original, con arquillos apuntados a los que falta el mainel central. Encima luce un escudo del XVII, con cartela de cueros retorcidos y una inscripción en la que puede leerse: IVAN REMIREZ DE ESPARZA CVIA ES/ LA CASA DE ALDAZ ECHABACOIZ/ AÑO 1616. Encima lleva una crucecita y un guardalluvias. En lo alto de la fachada corre una cornisa moldurada. Encima de la puerta se abre una ventana cuadrangular, con pequeño remate conopial en su centro y antepecho labrado. Una ampliación lateral de esta fachada presenta vanos que repiten el remate conopial en sus vanos, y va coronada en alto por una galería de cuatro arcos de medio punto doblados.

A este cuerpo residencial principal se adosan tres alas que conforman una planta de gran desarrollo, con patio central. Otra ala perpendicular se abre con un arco de medio punto con nueve dovelas largas. En la zona trasera del conjunto ha pervivido, de forma fosilizada, una torre de linaje de la Edad Media, que sin duda fue el núcleo original del palacio. Tiene planta rectangular, cuatro alturas y tejado en pabellón. Se levantó en sillarejo y mampostería, y en lo alto muestra cornisas de piedra que pueden relacionarse con la existencia de un cadalso de madera.

Parroquia de San Esteban

Se trata de un templo protogótico, fechable en el entorno de 1200, que se ha conservado en un estado bastante puro, merced a esa especie de "fosilización" de la arquitectura que tantas veces se da en los antiguos señoríos medievales. La planta, de extrema sencillez, consta de una única nave, rematada en testero recto, con el acceso abierto por el lado de la Epístola. La sacristía es un espacio de planta rectangular, adosado al muro oriental, mientras que un único tramo se separa a los pies de la fábrica, marcado con los arranques de un arco fajón, para sostener la torre que se levanta encima.

Los muros son de sillería de buen tamaño y aparentemente bien aparejada, aunque los bloques acusan hoy un regular estado de conservación. Al interior van enlucidos, imitando el despiece de sillares isódomos. Se perforan por la apertura de una única ventana, rematada por arco de medio punto, que se abre en la cabecera, por el lado meridional. A los pies de la nave se levanta un coro de madera, y en el mismo ámbito registramos el volumen cilíndrico de la escalera de caracol, para acceder al propio coro y a la torre.

El templo tuvo en su día bóveda de cañón, de la cual perviven restos de uno de los fajones, aunque en la actualidad presenta una techumbre plana sustentada por vigas de madera. La sacristía recibe un cielo raso.

Al exterior, la torre se levanta, como ya hemos dicho, sobre el tramo de los pies. Lleva planta rectangular, fuste corto y macizo, perforado tan sólo por algún tragaluz y por los huecos para las campanas, que se rematan con arcos rebajados. La puerta se abre en un paño saliente del muro, entre dos contrafuertes, y consta de un arco gótico apuntado, con dos arquivoltas lisas de sección cuadrangular, que apean en otros tantos pies derechos con molduras a modo de capiteles corridos. No tiene tímpano, pero en cambio lleva la clave adornada con un crismón trinitario.

En el interior del templo, preside la cabecera un retablo renacentista del siglo XVI, bajo la advocación de San Esteban, en el que pudo trabajar el pintor pamplonés Ramón de Oscáriz. Su traza consta dos cuerpos de tres calles cada uno, y ático con frontón triangular. Se articula mediante pilastras cajeadas. En cuanto al programa iconográfico, en el primer piso se representan las escenas pintadas del Nacimiento de Cristo, Virgen con el Niño y Adoración de los Magos, mientras que en el segundo cuerpo, dedicado al santo titular, se representan las tablas de la Predicación y la Lapidación de San Esteban, que flanquean una talla del santo, de la misma época, y reservando el ático para el Calvario. Son pinturas en las que los personajes tienen rasgos marcados y simplificados, casi caricaturescos, enmarcados en paisajes y arquitecturas de influencia flamenca. También en el presbiterio encontramos sendos lienzos barrocos, muy perdidos, y un sagrario renacentista también deteriorado.

En el lado del Evangelio encontramos una pila de bautismos medieval, con fuste cilíndrico y copa semiesférica, sin decoración. Hay también una Virgen del Rosario barroca, así como un sagrario de piedra del siglo XVI.

Joseba ASIRON SAEZ (2008)